Si nos dejan

Nací en 1985, cursé la primaria y la secundaria entre 1992 y 2001. De ese período a la fecha, muchas cosas han cambiado. No existía Wikipedia, las investigaciones se hacían en la enciclopedia que existiera en el hogar, en una monografía de la pape de la esquina y me tocó la transición a la Encarta. Algunas veces utilicé la maquina de escribir, en casa éramos afortunados de contar con una eléctrica. Las exposiciones escolares se hacían en una cartulina, Microsoft y su Power Point llegaron mucho después.

En el párrafo anterior hablé del ámbito escolar, pero los cambios están presentes por doquier. La estructura social se ha modificado mucho. Cuando iba en quinto de primaria sólo había dos niños que sus padres estaban divorciados, hoy en día es difícil que los matrimonios perduren y vemos un sinfín de formas de familias.

La homosexualidad era un tema tabú, el niño que no jugaba fútbol o algún deporte corría el riesgo de ser llamado mariquita. Ser joto era un gran motivo para que agarraran a alguien de su puerquito. De mujeres homosexuales ni se hablaba, no existía esa posibilidad de relación. Hoy en día cada vez son más comunes las uniones entre personas del mismo sexo, este fin de semana asistí a un enlace gay por primera vez.

Una gran amiga unió su vida con su novia, ya son esposas. La ceremonia me resultó diferente porque nunca había visto a dos mujeres vestidas de blanco en una boda, de ahí en fuera todo fue idéntico que en cualquier otro enlace nupcial, una pareja que se ama y decide formalizar su amor. Un sacerdote ofició una ceremonia muy linda en la cual habló de la importancia del amor en un mundo en el que no debe de existir racismo ni discriminación. Recalcó que las instituciones deben de estar al servicio de los seres humanos, sin importar que éstos pertenezcan a grupos minoritarios.

El sacerdote las declaró como esposas y terminó con la palabra conocidos por todos; amén. Aparecieron los mariachis y entonaron «Si nos dejan» de José Alfredo Jiménez.

Saludos intergalácticos.

Nota: no quise sonar peyorativo al utilizar palabras como mariquita o joto, así se utilizaban en mi época de primaria y secundaria.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s